Paco Tijerina
Contra lo que cualquiera pudiese pensar, acertar en un pronóstico no siempre termina siendo positivo.
Escribo profunda y seriamente preocupado por lo que sucede con la Fiesta Brava en Monterrey, mi tierra, ese lugar que no hace mucho era un referente en el país en materia taurina.
Monterrey, tierra de grandes toreros y que hace ya también muchos años, muy cerca de su Monumental en el viejo parque Cuauhtémoc de la Calzada Victoria donde jugaban los Sultanes, tenía un letrero sobre su entrada que rezaba: “Por esta puerta cruza la mejor afición de México”, sí, la mejor afición, como esa que cada fin de semana llena sus estadios de futbol. Con el toro era igual, pero desde hace tiempo no.
No me sorprende porque lo predije, “si acaso irá media plaza y con una fatídica puntería acerté, pero algo debe estar desesperadamente mal cuando la figura del momento, la novedad mundial del toreo, apenas lleva a cinco mil personas a los tendidos para registrar “media plaza”, hablo de Andrés Roca Rey.
Deseo aquí aclarar que no pretendo buscar culpables sino soluciones, no se trata de señalar personas o acciones, sino de encontrar los yerros, buscar opciones, hurgar en las posibles respuestas y echar a andar una estrategia que le devuelva a la ciudad y su afición el lustre y brillo perdidos.
Hace tiempo le escuché a un altísimo directivo de la empresa la siguiente frase: “¿Pero qué quiere la gente de Monterrey, por qué no viene al toro?”, como si la culpa fuese de los clientes sin detenerse a pensar en que las causas están en otros sitios y no únicamente en la propia empresa, sino también en los profesionales, llámense ganaderos, subalternos, autoridades y demás.
Me consta que han explorado opciones, pero hasta ahora no han funcionado. Veo la tímida promoción mediante “menciones” en el espacio deportivo de una sola cadena de televisión y vi, porque el interés me movió a buscarle en Facebook, el montón de videos que subieron de Roca Rey, pero seamos honestos, ¿quién acude a buscar específicamente la página de la plaza en la red social?
He sabido de promociones y activaciones, pero siguen sin ser suficientes. Visto está que lo emprendido hasta ahora no funciona y por lo mismo me cuestiono: ¿por qué entonces siguen haciendo lo mismo esperando diferentes resultados? Publicar un desplegado en la sección deportiva del diario “de mayor circulación” no refleja la inversión.
La promesa de los profesionales reunidos en una agrupación que pretende defender y promocionar la Fiesta no ha pasado de eso, de una mera promesa, porque los millones y millones de pesos que se supone tenían para el proyecto no se ven por ningún lado, por lo menos en Monterrey.
Hablo de un mal mayor que requiere de importantes y urgentes medidas si es que acaso queremos preservar la Fiesta en nuestra ciudad.
Y no, no quiero hoy hacer un pronóstico de la entrada para el festejo del próximo 7 de mayo, porque tengo terror de volver a atinarle.