En noche calurosa y ante unos 3 mil 500 asistentes, se lidiaron cinco toros de José María Arturo Huerta y uno de Guanamé (2° bis) que sustituyó a uno del hierro titular que fue devuelto; parejos de peso y presencia aunque de juego desigual, destacando 1° y 3° que fueron los mejores del encierro.
José Mauricio: dos orejas y palmas.
Juan Fernando: palmas y silencio.
Sergio Flores: palmas tras aviso y silencio.
Al final el toro devuelto fue lidiado por el matador Angelino de Arriaga que estuvo digno ante un burel que no dio opciones de lucimiento.