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Paco Tijerina
En corto y por derecho, sin escurrir el bulto ni escaparse de la suerte, Alberto Galindo “El Geno”, matador de toros y empresario, aclara el motivo del pretendido “veto” impuesto a la plaza de toros Cadereyta por la Asociación de Matadores y la Unión Mexicana de Picadores y Banderilleros.
Sin ambages “El Geno” suelta: “Detrás de todo está Mariano del Olmo, con quien tengo un pleito que de personal pasó a los juzgados y ahora se le puso bloquear el festejo que estoy programando para el 18 de junio en Cadereyta”.
La historia se remonta a un festejo programado para el 7 de febrero del año anterior en Culiacán, Sinaloa, organizado por “El Geno” y en el que comenta contrató un paquete de plaza portátil, actuantes (entre los que estaba el rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza) y ganado a Del Olmo, pero que sorpresivamente y sin justificación se le canceló dos días antes de celebrarse el mismo.
La cancelación, añade el diestro, le provocó una serie de gastos y pagos que Mariano del Olmo no quiso asumir a pesar de que, afirma, en diversas ocasiones y por diferentes medios trató de cobrarle, por lo que en octubre del año pasado se vio en la necesidad de interponer una demanda ante las autoridades competentes.
“De ahí nace todo esto” dice seguro el matador regiomontano.
EL PRETENDIDO ADEUDO A JOSELITO ADAME
Sobre el supuesto adeudo de 100 mil pesos a Joselito Adame de parte de “El Geno”, comenta que el asunto data del 8 de febrero de 2015 cuando en el coso escobero actuaron la rejoneadora Mónica Serrano y a pie Juan Bautista y Adame.
Galindo afirma que Del Olmo le pidió hacerse cargo de la organización del festejo y que fue en su calidad de promotor taurino que aceptó el trabajo, pero que nunca fue el organizador del festejo, “fueron ellos mismos”, asegura.
“Quien acusa está obligado a probar su dicho y no existe un contrato en donde yo me haya comprometido a pagar ninguna cantidad a Joselito Adame”, afirma “El Geno” quien agrega: “por el contrario, en la demanda que tengo contra Del Olmo están todas las pruebas del dinero que le estoy exigiendo”.
LAS AGRUPACIONES
El matador regiomontano comentó que le daba tristeza la actitud asumida por la Asociación de Matadores y la Unión de Picadores y Banderilleros quienes por temor a la posición que tiene en la fiesta Del Olmo de inmediato se prestaron a orquestar un supuesto “veto” sin comprobar lo que realmente sucedió.
Dijo que ni Paco Dóddoli ni Edmundo Navarro, representantes de los toreros y subalternos, respectivamente, fueron capaces de explicar el por qué si el adeudo data del 2015 es hasta ahora que impusieron el veto y no antes, “cuando se han dado corridas en las que hasta Enrique Ponce ha actuado”.
LOS OTROS SEÑALADOS
El 19 de junio de 2016 en la misma plaza se realizó una novillada en la que el también matador de toros Raúl Rocha fue la empresa y en el que el novillero Jorge Didier resultó con una cornada.
Sin estar directamente involucrada en la empresa -sólo pidió la plaza y gestionó los permisos- la empresaria y apoderada Vicky Lozano fue señalada en el boletín de la Asociación de Matadores junto con Rocha por “no haber liquidado los gastos inherentes a la atención médica de Didier durante las primeras 24 horas”.
Lozano asegura que a pesar de que se contaba con personal médico, fue decisión de Didier y su apoderado que se trasladarían a Aguascalientes para ser atendidos allá y que le firmaron una carta en donde renunciaban al derecho de atención y eximían de cualquier responsabilidad a la empresa.
Incluso, añade Vicky, a pesar de ello “Paco Dóddoli” le estuvo cobrando en varias ocasiones a Rocha y ante ello le fueron hechos diversos pagos, por lo que el pretendido adeudo no existe.